Estamos constantemente inundados de artículos que presentan el mundo digital como la panacea de la conversión (y, por tanto, venta). Con todos mis respetos, buceé hasta encontrar estos calcetines para sillas en upsocl y me propuse el reto de que este artículo “convirtiera”.
Probablemente si un cliente llegara con este producto, motivado con su nuevo proyecto, yo debería decirle que no es posible venderlo. Pero, señoras, señores, él ha leído el caso de éxito de Hawkers, y quitarle esta idea de la cabeza va a ser realmente complicado.
En este caso, lo que acabas sugiriéndole es una estrategia, en la que realmente confías, porque ¡oye! HAY PERSONAS QUE NECESITAN ESTOS CALCETINES PARA SILLAS (Y PUNTO), pero es entonces cuando viene el momento más delicado: la inversión.
No sé en qué momento nos han contado a todos que la venta online es un proceso fácil, sencillo y económico.Pues bien, igual que deberías pagar tu alquiler, personal, notarías, licencias, comunicación… El mundo digital requiere parte o incluso el mismo despliegue presupuestario. ¿Por qué? Pues porque el beneficio reside en el alcance que tu producto consigue. Vender en el 46002 (Valencia) o en el 065001 (China) está al alcance de un click. Y ojo, que a China no se lleva solo 😉
En definitiva, cuando leas un artículo de 5 metodologías que garantizan la venta de tu producto, desconfía. Y más si el artículo y lo que te proponen es GRATIS. Así, en mayúsculas.
La conversión necesita de un buen producto, una buena campaña de comunicación, un equipo que trabaje una estrategia digital, mantenimiento y un buen presupuesto. Aunque duela. Si estás pensando en vender algo que no sean calcetines para sillas, puedes contactar con el equipo digital de Estimado Jose Alfredo, que, de esto, sabe cosas.